lunes, 20 de diciembre de 2010

cogito ergo sum

Nunca supe exactamente cual es mi personalidad. Si quiero una cosa, me encasillo en una personalidad, si quiero otra, suelo cambiar mi casilla. Pero es que, ¿tenemos que encasillarnos? La -corta pero intensa- experiencia propia me dice que no. No debemos encasillarnos en ningún sitio. Seguramente si lo hacemos, nos estemos equivocando. Pero no es ningún fallo, no es un error, ni un defecto. Es algo normal y general en aquello a lo que llamamos raza humana. 
En un vistazo general, puedo decir que padezco una personalidad bipolar. Igual no me alejo mucho de la realidad. El caso es que no me suelo preocupar por ponerle nombre a eso que me pasa. Sino a lo que verdaderamente me pasa, al contenido, sin preocuparme de su significante. Y es que cada día siento algo diferente por las personas. Un día siento que les amo, que me encanta estar rodeada de toda esa gente, conozca o no. Porque cada uno guarda un mundo que descubrir, y todos son importantes. Pero...otras veces, esas mismas personas que me hacen emanar un gran amor e interés por ellas sin apenas conocerlas, son los mismos que me hacen emanar cantidades desorbitadas de odio e ira. 
Nobody knows
A veces pienso que todo esto viene dado por mis circunstancias. Por mis actos, mis vivencias, experiencias... Pero es imposible que sólo me pase a mí, normalmente no encuentro a mucha gente que le pase lo mismo. Entonces, ¿debo pensar que tengo un problema conmigo misma? No lo sé. No sé nada. El caso es que este mundo es de locos. Todos locos. Si tienes ilusión por una cosa, será lo único que pueda traerte la desilusión por la misma. Pero...al fin y al cabo, la vida se compone de aquellos momentos que te dejan sin respiración, de las pequeñas cosas, de los buenos actos. Así que, tendré que aprender a pensar en ello y a corroborarlo cada vez que emane todas esas cantidades de odio e ira, y a ver si de esa forma disminuyen y, con un poco de suerte, logro alcanzar hasta el mejor del bien estar. El clímax de la felicidad. Ese que sólo he alcanzado un par de veces en mi vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario